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Cómo calibrar los sensores de temperatura
Source: | Author:L | Published time: 2024-09-14 | 10 Views | Share:

Cómo calibrar los sensores de temperatura

Durante la producción, las lecturas de los sensores de temperatura se documentan como calibración tal cual. A continuación, el personal ajusta los sensores para que muestren el valor esperado. A continuación, repiten la prueba y registran los resultados, lo que se denomina calibración tal cual.

Los termómetros de resistencia de los sensores digitales tienen una deriva baja, por lo que no suelen requerir más ajustes. Sin embargo, si las lecturas del sensor están fuera de tolerancia, es probable que el equipo haya sufrido daños y deba ser sustituido.

Para la calibración de los sensores de humedad se aplican procedimientos y terminología similares. En comparación con los sensores de temperatura, los sensores de humedad tienen un mayor riesgo de desviación, en particular cuando se utilizan en entornos extremadamente húmedos o extremadamente secos. Por lo tanto, suelen ajustarse durante la recalibración. La primera calibración se denomina «calibración tal como se encuentra» y documenta el estado antes del ajuste. A continuación, el sensor se ajusta en función de la desviación medida. A continuación, se realiza la llamada «calibración tal cual» para comprobar si el ajuste se ha realizado correctamente. Si un sensor de temperatura está fuera de tolerancia, es probable que se haya contaminado demasiado y/o esté dañado físicamente. Por lo tanto, se suele cambiar.

¿Cuáles son los puntos de temperatura correctos para calibrar los registradores de datos de la cadena de frío?

La normativa no especifica el número de puntos ni sus valores. No obstante, lo mejor es calibrar los registradores de datos a tres temperaturas, a menos que exista un argumento convincente y pruebas claras para utilizar menos puntos.

Los sensores deben ser estables en las condiciones de funcionamiento especificadas. Por lo tanto, los puntos de calibración deben cubrir el rango previsto. Por ejemplo, -30 °C, 0 °C y 50 °C controlarían correctamente los entornos típicos de congelación, refrigeración y temperatura ambiente.

Por último, es aceptable calibrar los indicadores electrónicos de un solo uso y de bajo coste en un solo punto de temperatura.