1. Haz una lista de los equipos y materiales que necesitarás.
Puede incluir patrones de calibración, herramientas, equipos de prueba, piezas de repuesto (baterías), un ordenador portátil, una rotuladora y equipos de seguridad. Deberías incluir cualquier EPI que requiera tu cliente para estar siempre seguro.
2. Asegure el equipo en una furgoneta.
Utilice correas u otras herramientas de sujeción para evitar que el equipo se mueva durante el transporte. Si es posible, utilice una furgoneta en la que pueda disponer de cubos de almacenamiento, estantes o estanterías para que cada pieza del equipo tenga una ubicación adecuada y segura. Esto ayuda a minimizar el riesgo de daños causados por impactos o vibraciones.
3. Etiquete el equipo.
Etiquete claramente cada artículo con su nombre, número de serie y cualquier otra información que pueda necesitar. Esto facilitará el seguimiento del equipo y la búsqueda de lo que necesita mientras trabaja.
Traducción realizada con la versión gratuita del traductor DeepL.com
4. Utilice un vehículo con climatización controlada.
La temperatura y la humedad pueden afectar al rendimiento de su equipo de calibración, por lo que es importante transportarlo en un entorno climatizado siempre que sea posible.
5. Tenga un plan de emergencia.
A pesar de una planificación cuidadosa, a veces las cosas pueden salir mal. Disponga de un plan de reserva en caso de que algo se pierda o se dañe durante el transporte. Tanto si eso significa disponer de equipos de repuesto como de un plan de contingencia para recalibrar los equipos que se hayan visto afectados por las condiciones de transporte, lo mejor es estar preparado.